La tarde de ayer, algunos asistimos al Cementerio Civil de Madrid a visitar a Xavier Zubiri y a su esposa, Carmen Castro, para rememorarle, respetarle y agradecerle.
Ahí, en acto solemne, en solitudo, en soledad sonora, hemos tomado prestadas unas líneas del Discurso del Padre Nuestro, libro del teólogo español José María Cabodevilla, para orar con ellas a modo de lo que podría llamarse: "Oración de la inteligencia", así:
Danos, Señor, una inteligencia despierta para procurar entender tus verdades y a la vez sensata para comprobar y entender sus propios límites, batalladora en la investigación y mansa en la exposición, indulgente con los que yerran y contrita ante sus propios yerros, imparcial en sus juicios y siempre acatadora de los tuyos, una inteligencia libre para proclamar tu verdad y modesta para no imponer sus propias verdades, apta para escucharte a ti, que eres la Sabiduría, y humilde para no desertar de ti, que has querido explicarnos las cosas como las explicaría un sabio a sus nietos. Amen.
Nunca mejor apropiada esta oración que ante el sepulcro mortal de quien dedicara la vida a pensar la inteligencia. Gracias, "Josechu".
Aquí os compartimos un pequeño álbum de fotos:
La nota dice: "Con profundo respeto y admiración, vinieron a visitarte tu alumno, Carlos Sierra-Lechuga, siempre agradecido, y su esposa Joselyn Andrade Contreras. 22/Enero/2018" |
Y para cuando quieran ir, os compartimos también estas dos fotos más:
Aquí puede verse el lugar específico donde está la tumba, así como la fecha de inhumación. |
Para que no os perdáis, se halla en el 5B. (En el mapa, la entrada está en la parte superior). Entrando, al fondo; doblar a la izquierda y al fondo nuevamente. |
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